Las tortugas marinas, son habitantes muy importantes del mar y están en peligro de extinción. Se catalogan como especies centinelas, es decir, son indicadoras de la salud de los océanos; también son especies sombrilla porque su protección beneficia a muchas otras especies con las que comparten ecosistema.
Por ello, proteger a las tortugas marinas no solo influye en su preservación, también nos permite contribuir en el equilibrio ecológico de los océanos e impactar así de forma directa en el número 14 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados por Naciones Unidas: Vida Submarina.
El Caribe Mexicano es uno de los lugares favoritos para las tortugas marinas, especialmente para las especies conocidas comúnmente como tortuga caguama (Caretta caretta) y tortuga blanca o verde (Chelonia mydas). Tenemos el privilegio de convivir con ellas, pero también tenemos la responsabilidad de protegerlas, y esta responsabilidad es de todos los sectores de la comunidad.
En Quintana Roo existen numerosos esfuerzos para la conservación de las tortugas marinas promovidos por instituciones públicas, organizaciones de la sociedad civil, universidades y centros de investigación, empresas socialmente responsables, grupos comunitarios o personas voluntarias. Un claro ejemplo es el “Programa de Conservación de Tortugas Marinas Riviera Maya – Tulum”, iniciado en 1982, hace 40 años, gracias al Centro de Investigaciones de Quintana Roo, siendo un proyecto pionero en esta causa. A día de hoy, es reconocido nacional e internacionalmente por su extensión, trayectoria y resultados.
Este programa, operado desde 2002 por Flora, Fauna y Cultura de México, A. C., en alianza con otras instituciones, protege a las hembras, crías y nidadas de 13 playas de anidación a través de distintos campamentos tortugueros, ubicados estratégicamente a lo largo de 34 km de costa. Registra más de 12,000 mil nidos por temporada y ayuda a llegar al mar a aproximadamente un millón de crías cada año. Además, colabora en diferentes proyectos de investigación y divulgación científica, así como en eventos, congresos, foros y otros mecanismos de participación para incidir en políticas públicas (comités municipales, comisiones, mesas de trabajo, entre otros).
La capacitación técnica, la sensibilización y el involucramiento comunitario son también componentes indispensables sin los cuales el impacto de los esfuerzos de protección sería mucho menos trascendental.
En este sentido, para celebrar los 40 años del Programa, y las dos décadas que lleva operándolo esta organización, Flora, Fauna y Cultura de México, A. C., lanza la campaña “Salva tu Nido”, una plataforma permanente para la promoción y difusión de las acciones de conservación de las tortugas marinas en el Caribe Mexicano.
Salva tu Nido surge con el objetivo de fomentar y facilitar el involucramiento de más personas y empresas a esta causa. Así, la campaña propone un catálogo de mecanismos de participación capaces de convertir el interés de ayudar a las tortugas marinas en acciones que contribuyen de forma directa a su conservación. Hay muchas formas de “salvar tu nido” ¿quieres buscar la tuya?
